Una organización de los hombres de buena voluntad (+ Video)

Para construir una república con todos y para el bien de todos y de los hombres de buena voluntad, fue cardinal el surgimiento del Partido Revolucionario Cubano (PRC), el 10 de abril de 1892.

José Martí pensó y organizó una fuerza político-militar que uniera a los cubanos, que vieran como necesaria una guerra de independencia para fundar una república nueva, dijeron los panelistas participantes en la Mesa Redonda de este martes, titulada “Martí y el partido de los hombres de buena voluntad”.

Para los investigadores Yaliemny Pérez, Ibrahím Hidalgo y Pedro Pablo Rodríguez, reunidos en Mesa Redonda, la frase martiana de con todos y para el bien de todos es un concepto revolucionario para su época, al plantear que había que abrir espacios para las grandes mayorías.

Para el doctor Pedro Pablo Rodríguez, investigador titular del Centro de Estudios Martianos, fue el PRC uno de los elementos tangibles del pensamiento martiano sobre la independencia de Cuba, como también lo fueron la guerra necesaria y la construcción de una república para todos los cubanos.

“Martí aprovechó para desde el propio proceso del partido, que busca y logra la unidad para impulsar la guerra, ir creando las bases de la república… Porque hay que garantizar que la guerra sea de espíritu republicano”, señaló Pedro Pablo Rodríguez.

El objetivo fundamental del Partido era fundar una república nueva, unida, revolucionaria e independiente, como precisó Ibrahim Hidalgo, investigador auxiliar del Centro de Estudios Martianos.

Porque, como puntualizó Hidalgo, el Partido Revolucionario Cubano “surgió resultado de un proceso de enfrentamiento de las fuerzas político militares que existen en la Cuba colonial de la época”.

Al explicar en detalles el funcionamiento interno del Partido Revolucionario Cubano, la Máster Yaliemnys Pérez Sardiñas explicó que fueron los clubes las células fundamentales del PRC. Igualmente destacó que esos círculos políticos estuvieron integrados por personas de un gran patriotismo y profundo amor por Cuba, a la vez que resaltó el papel de los exiliados en Cayo Hueso (Estados Unidos) como el principal bastón de la organización en el exterior .

El Apóstol estaba convencido de la necesidad de cohesión y unidad de todas las fuerzas patrióticas para obtener la independencia absoluta y crear la república.

Ese fue el principal objetivo del Partido Revolucionario Cubano, una organización político-militar con estructura abierta y piramidal, integrada mayormente por obreros aglutinados en clubes de base.

Legado ideológico

Partido, guerra, república, son tres conceptos inseparables en José Martí, quien veía la guerra no solo como un hecho militar, sino como un procedimiento político, y como espíritu y método para llegar a la república nueva.

En la Mesa Redonda se afirmó que el sentimiento patriótico caracterizó desde sus inicios al Partido Revolucionario Cubano, fundado hace 120 años, cuyo mayor legado es en el plano ideológico. En sus postulados resalta el pensamiento antiimperialista, anticolonialista y anti-injerencista.

En Martí, todo esto es una unidad, en la que no falta la lucha contra todo género de discriminación. Otra preocupación del insigne patriota cubano fue la formación de los ciudadanos, y las elecciones en los clubes del Partido fue un procedimiento que contribuyó a crear esa práctica ciudadana.

En resumen, el Partido Revolucionario Cubano fue el embrión de la Revolución Cubana.

(Con información de Radio Rebelde y Radio Reloj)