Este enclave naval yanqui ocupa unos 117,6 kilómetros cuadrados de Guantánamo desde 1903, y viola los tratados in¬ter¬na¬cionales de los cuales Cuba y EE.UU. son suscriptores.

Fotos: Roberto Garaicoa

Por Yailin Orta Rivera, especial para la Mesa Redonda ^[1]

En el IV Seminario por la Paz y Abolición de las Bases Militares Extranjeras, que sesionó recientemente en la provincia de Guantánamo, los más de 200 participantes reclamaron la devolución del territorio ocupado por la ilegal base naval norteamericana, en un contexto en el que ello constituye un elemento clave en el proceso hacia la normalización de relaciones entre Cuba y Estados Unidos.

Este enclave naval yanqui ocupa unos 117,6 kilómetros cuadrados  de Guantánamo desde 1903, y viola los tratados in­ter­na­cionales de los cuales Cuba y EE.UU. son suscriptores.

Entre los propósitos del evento, que contó con representantes de unos 30 países, también estuvo incrementar las acciones por la paz universal, y de­nunciar la política injerencista de las grandes potencias, empeñadas en establecer bases militares ^[2] en todos los continentes.

En la Mesa Redonda de este martes María do Socorro Gomes, presidenta del Consejo Mundial por la Paz, precisó que esta cita estuvo precedida de los sustantivos debates acaecidos en la reunión del comité ejecutivo del Consejo que dirige, que adoptó entre sus acuerdos celebrar la Asamblea Mun­dial por la Paz, en Brasil, en noviembre de 2016.

El espacio del evento fue propicio para hacer pública la con­vocatoria al Primer Seminario Inter­na­cional Realidad y desafíos de la proclama de América Latina y el Caribe como zona de paz ^[3], previsto para La Habana del 21 al 23 de septiembre del 2016.

En opinión de Do Socorro Gomes, es imprescindible tomar conciencia, como ha dicho el Papa Francisco, sobre las desestabilizaciones que han provocado las guerras, impulsadas por las grandes potencias, las mismas que pretenden dominar el mundo con los enclaves militares.

Defendió la idea de que se está viviendo un momento de mucha gravedad. “Estados Unidos posee bases militares en todas las regiones y controla todos los océanos con sus flotas de la marina de guerra, además de que tiene instalados antimisiles y ejecuta el espionaje satelital.

“Han dejado sus efectos en Iraq, Afganistán, Siria, Libia, Yemen, Europa del Este… y pretenden cercar a Rusia y contener a China y a América. También hemos apreciado cómo los mismos grupos terroristas financiados y sostenidos por ellos se han convertido en los enemigos de la humanidad”.

La declaración final de este encuentro la consideró un libreto de acusación e instrumento para enfrentar esta dura realidad. “Es, asimismo una denuncia desde los pueblos de paz de todo lo que ha pasado. Queremos que se acabe con el colonialismo y neocolonialismo en el mundo. Y debemos comprender que no hay paz si no se respetan los principios de la ONU, que defienden que cada pueblo elija su destino. Este encuentro fue un compromiso con la paz y un espacio desde el que se exigió desmantelar las máquinas de guerra, la OTAN ^[4], las armas nucleares, y que se quiten todas las bases militares, empezando por Guantánamo, la primera del mundo contra la voluntad del gobierno y del pueblo”.

Según sus palabras, la declaración es un mecanismo de concientización y va dirigida a todos los países. “Cada día tenemos que seguir aunando más esfuerzos. Las potencias imperialistas no tienen límites y las fuerzas del pueblo tienen que ponerle contención a esto”.

Para Silvio Platero, este seminario, que reúne a pacifistas, activistas y muchas otras personas de buena voluntad, ha ido ganando en nivel de convocatoria, la cual se realiza con un año de antelación, porque quienes asisten no tienen grandes recursos y planifican su economía en función de poder estar en este evento, que en esta ocasión tuvo el bonito gesto de ocho italianos que hicieron parte de su travesía en bicicleta.

Entre las novedades de esta edición, destacó el logotipo, que constituyó una iniciativa de la Asociación de Comunicadores Cubanos, y fue un aporte voluntario de esa organización.

También programaron actividades culturales como un concurso de carteles, y entre más de cien propuestas se escogieron unos 46 para una exposición. “Porque esta convocatoria tuvo el anhelo de hacerse sentir con expresiones artísticas y un uso más adecuado de los medios alternativos, que hablaron de la importancia de que se alzara esta voz”.

“Es una situación difícil, complicada. Hace un año nos preocupamos no solo por los problemas internos en Chile, y con hacer justicia con los crímenes pendientes de la dictadura, queremos aportar más, en tiempos en que se viven días difíciles en América Latina y el Caribe”.

En 2013, por ejemplo, se inauguró una base en Chile. “El gobierno de Bachelet no ha querido entregar información, pero han participado marines en entrenamientos. Todo esto ha condicionado que los pacifistas luchemos porque haya justicia, igualdad, respeto, valores que hemos encontrado en este seminario”.

Aludió a que hoy queremos lograr que se vayan las bases, “pero miembros de los viejos ejércitos están ofreciendo servicios como contratistas. Al tiempo de que hay cosas de ética y moral. Las organizaciones han exigido al gobierno de Chile que retire todo retrato de victimario, como Pinochet y otros, que los tienen en la sala del ejército, y un comandante en jefe como Oviedo dice que sacar los retratos sería no mantener la historia, y coincidimos en que se deje, pero hay que apuntar que fueron represores del pueblo chileno. Contra la injusticia no se puede tener actitudes tibias”.

Felipe Ferreira, de Portugal, representó los reclamos del pueblo Europeo, que aunque tiene muchos países miembros de la OTAN y participan en las agresiones, eso no quiere decir que no existan muchas personas que aman la paz y que salen a la calle cada vez que los gobiernos son parte de una nueva acción hostil.

“Toda esta postura de los gobiernos hegemónicos es lo que ha dado al traste con que miles de refugiados llegan a Europa, los mismos que ayudó a crear cuando desestabilizó a países como Libia, como Siria… Los pueblos europeos no quieren esa Europa que sus líderes convierten en países de agresión. Ellos sienten que los que agreden son los mismos que crean el desempleo, la emigración… es importante mezclar las dos cosas, porque están interrelacionadas”.

Alicia Lira, otra de las participantes, aseguró que como miembros del observatorio no podemos ser indiferentes con la paz del mundo.

En opinión de Do Socorro Gomes, es imprescindible tomar conciencia, como ha dicho el Papa Francisco, sobre las desestabilizaciones que han provocado las guerras, impulsadas por las grandes potencias, las mismas que pretenden dominar el mundo con los enclaves militares.