Interesantes facetas de la vida de Antonio Martínez Rodríguez y de la historia del Hotel Nacional de Cuba (HNC), que dirige desde hace 22 años, fueron reveladas hoy en el espacio radiotelevisivo Mesa Redonda.

Martínez Rodríguez expresó, visiblemente emocionado, su afecto muy especial por Fidel, quien le animó a emprender la dirección de esa instalación hotelera calificada por el líder revolucionario como la nueva trinchera que debía asumir en lo adelante.

Antomio Martinez Director del Hotel Nacional de Cuba es el invitado a la mesa Redonda .Foto:Roberto Garaicoa/Mesa Redonda.

Calificado por huéspedes de diversos países como un anfitrión excepcional y un directivo con ideas novedosas en función de diversificar y hacer más atractivos los servicios y la atención a los clientes, el director general del HNC aseguró que una obra no la hace un hombre solo y destacó el apoyo incondicional de su equipo de trabajo.

Recordó cuando fue designado para dirigir ese símbolo de la cubanía, en momentos en que estaba en una situación financiera comprometida, y las experiencias que tuvo al recorrer hoteles emblemáticos de Madrid, Barcelona y Moscú que le provocaron algunas ideas para llevar a la práctica.

Fue así que a su regreso se sintió motivado a indagar acerca de la historia del Hotel Nacional, y a partir de ahí surgieron proyectos que reflejaron aspectos relevantes de su construcción, de los famosos que se hospedaron en él, pero también de los objetivos que llevaron a crear allí casinos de juego.

De no haber sido por el triunfo de la Revolución en 1959, los propósitos de mafiosos estadounidenses habrían cambiado el entorno de esa instalación hotelera con la edificación de salones de juego.

Arleen Rodriguez Derivet
Foto: Roberto Garaicoa/
Mesa Redonda.

El Hotel Nacional de Cuba fue construido por la misma compañía que hizo el Capitolio de La Habana y en 1930 quedó inaugurado.

La gente que viene a Cuba como turista si bien elige en muchos casos el segmento de sol y playa, también viajan interesados en la cultura del país, y en los salones del HNC le mostramos parte de ese patrimonio cultural, dijo su director general.

Lo que tiene ese hotel y no tiene otro en el mundo son los túneles construidos en octubre de 1962 cuando la Crisis de Octubre o Crisis de los Misiles y se construyeron sin que se afectara ni un metro de sus jardines, señaló Martínez Rodríguez.

Antomio Martinez Director del Hotel Nacional de Cuba es el invitado a la mesa Redonda .Foto:Roberto Garaicoa/Mesa Redonda.

Dijo que la Crisis de Octubre fue un hecho muy peligroso no solo para Cuba, sino para la humanidad y estimaron que esa historia podía ser reflejada en esos túneles y que los turistas la conocieran.

Incorporado a la actividad revolucionaria a los 16 años de edad, Antonio Martínez Rodríguez se siente orgulloso de su etapa en la vida militar, de la cual pasó a vincularse a la esfera del turismo en el hotel Sevilla, luego en el Copacabana y desde hace 22 años dirige el Nacional.

Símbolo del turismo y la cultura, el Hotel Nacional de Cuba además de brindar un servicio de excelencia en el hospedaje, resulta una sede destacada del segmento de turismo de eventos, convenciones y congresos y atesora múltiples premios y reconocimientos.

Ha sido elegido líder del país por World Travel Awards, considerado como el Oscar de la industria turística en el orbe, pues el galardón se otorga a partir de un proceso de votación, unido a una campaña global de participación de la que forman parte expertos y especialistas relacionados con la industria del ocio.

Cuando en 1982 la UNESCO declaró a La Habana Patrimonio Cultural de la Humanidad, también tan altísima distinción fue extensiva a esta emblemática instalación, ya que en sus predios se hallan cañones del sistema defensivo colonial, y de una época más reciente, túneles y trincheras que recuerdan la Crisis de Octubre o de los Misiles, de 1962.

Esa historia al alcance de cuantas personas visitan el hotel, a la que se suma su Salón de la Fama, con fotos de las tantas celebridades que desde la década del 30 del siglo XX estuvieron alojadas o de paso por el Nacional, más la exhibición del menú preferido de 200 ilustres huéspedes de la arena internacional son, sin duda, valores agregados.