Moscú mantiene firme su posición respecto al despliegue del sistema de defensa antimisiles estadounidense en Europa ^[1], según ha subrayado el embajador de Rusia ante la OTAN, Dmitri Rogozin, en una entrevista a los medios rusos.

Rogozin destacó que Rusia no puede permitir que Washington tenga la posibilidad de neutralizar el potencial estratégico ruso.

El diplomático ruso afirmó también que en la carrera por su propia seguridad los socios de Rusia no deben olvidarse de su zona de responsabilidad. “La cuestión se ha hervido a fuego lento y ahora tenemos algo que decir a nuestros socios”, señaló Rogozin en su entrevista.

Además, el embajador ha expresado su impresión de que el entorno del presidente Obama no le permite dar ninguna garantía a Moscú de que los sistemas no estén dirigidos en su contra ^[2].

Entonces, según Rogozin, Rusia se vería obligada a responder de manera técnico-militar. Por otra parte, el embajador ruso ante la Alianza pone sus esperanzas en las decisiones que se tomarán en la cumbre de la OTAN en Chicago el año que viene ^[3].

(Con información de Actualidad RT)