Un masivo apoyo se espera para la huelga general en Chile que ha sido convocada por la Central Unitaria de los Trabajadores (CUT) para los días 24 y 25 de agosto, en rechazo a las actuales políticas del gobierno del presidente Sebastián Piñera.

El titular de esa confederación sindical, Arturo Martínez, indicó que la medida de fuerza cuenta con el respaldo de 80 organizaciones políticas, sociales, estudiantiles y defensoras de los derechos humanos.

La huelga general tendrá como objetivo exigir al gobierno la derogación de la Constitución que rige en el país, impuesta por el régimen militar de Augusto Pinochet (1973-1990), reseñó Prensa Latina.

También se reclamará por una reforma tributaria que reduzca la desigualdad y por el establecimiento del plebiscito como método para resolver los grandes problemas del país.

La protesta además tendrá como reclamo la exigencia de una educación pública y gratuita, demanda que desde hace tres meses llevan adelante los estudiantes y profesores.

El titular de la CUT explicó que la huelga general dará comienzo a un proceso de unidad social para enfrentar las políticas neoliberales oficiales.

El presidente del Colegio de Profesores, Jaime Gajardo, subrayó que en la protesta participarán todos los ciudadanos que abogan por cambios de fondo.

El martes por la noche se iniciará el paro con un cacerolazo por la igualdad social, mientras que el día 24 se paralizarán todas las actividades laborales, incluidos el transporte colectivo y el comercio.

Para el jueves se esperan concentraciones en las principales avenidas, parques y plazas del país trasandino.

Por su parte, varios partidos políticos de oposición se pronunciaron a favor de la huelga general y convocaron a la ciudadanía a participar.

El titular del Partido Socialista (PS), Osvlado Andrade, manifestó que el gobierno de Piñera es “empresarial y absolutamente refractario a los intereses de los trabajadores”.

El dirigente calificó de legítima la medida de fuerza y defendió la postura de respaldo al paro de su partido y de otros que integran la Concertación chilena, como el Partido por la Democracia (PD) y el Radical Social Demócrata (RSD).

Desde hace meses, en Chile se vive una creciente efervescencia social, donde los estudiantes encabezan movilizaciones en defensa de la educación pública.

A ellos se suman protestas que tuvieron como protagonistas a los obreros mineros, que en reiteradas ocasiones paralizaron sus labores.

Mientras tanto, la gestión del presidente Piñera muestra su nivel más bajo de popularidad desde que asumió el 11 de marzo de 2010.

(Con información de Patria Grande)