La Organización del Tratado del Atlántico Norte (Otan) ha atacado más de 50 instalaciones civiles y militares en las últimas 24 horas en la ciudad de Sirte, a 360 kilómetros al este de Trípoli, capital de Libia, informaron fuentes de la alianza atlántica.

De acuerdo con una nota de Prensa Latina, la ofensiva que llevan a cabo los grupos procolonialistas del autodenominado Consejo Naional de Transición (CNT), apoyados con los bombardeos aéreos de la Otan, ha incluido ataques indiscriminados contra zonas residenciales y el hospital Ibn Sina, cuya morgue está llena de cadáveres de civiles, según reportaron los mismos subordinados al imperio.

Debido a estas acciones de combate, el CNT admitió que 30 hombres de sus grupos armados han muerto y más de 200 resultaron heridos en los últimos dos días.

Entretanto, aviones de la Otan facilitaron este lunes a los procolonialistas el avance sobre amplias zonas de Sirte, aunque miembros del CNT reconocieron la dificultad de las incursiones debido a la resistencia de los patriotas libios quienes defienden a la República de la Gran Yamahiriya Árabe Libia Popular Socialista y al líder Muammar Al Gadafi.

Voceros del CNT manifestaron que sus hombres están revisando casas del este de Sirte, ciudad natal de Gadafi, tras la toma de edificios clave como la universidad de Ettahadi, el hospital Ibn Sina y el centro de convenciones Ouagadougou, refirió Prensa Latina.

Integrantes del llamado Consejo Militar de Misratah, que asumió parte de los ataques a Sirte, consideraron que hicieron “logros significativos” y pronosticaron que la conquista de toda la ciudad “está próxima a su fin, es cuestión de horas”, añadió la nota.

Los patriotas libios tuvieron que replegarse y disgregar fuerzas en puntos estratégicos para un inevitable combate “calle por calle y cuerpo a cuerpo”, como lo describieron testigos.

Sin embargo, los grupos procoloniales no han conseguido tomar el centro de la ciudad, donde está afianzada la resistencia popular apoyados por residentes, y amenazaron con recrudecer los enfrentamientos para tratar de acabar con “éxito” lo que desde hace cuatro días definen como el “asalto final a Sirte”.

Por otra parte, en cuanto a la situación de Bani Walid, otro de los bastiones que mantiene fuerte resistencia popular a la agresión imperialista, se pudo conocer que los procolonialistas optaron por conceder una tregua de dos días para persuadir a los combatientes y residentes defensores del gobierno libio para que se rindan.

La estrategia del autodenominado CNT en esa localidad que está situada a 150 kilómetros de Trípoli, capital de Libia, consiste en amenazar a los residentes con una ofensiva similar a la que llevan a cabo en Sirte si fracasan las negociaciones con los jefes tribales.

(Con información de Patria Grande/AVN)