Estudiantes chilenos junto a Stéphane Hessel

La agenda de trabajo de este domingo, de los líderes estudiantiles chilenos, comenzó temprano por la mañana con un encuentro de reflexión y conocimiento de experiencias de organización estudiantil con la UNEF, agrupación de estudiantes franceses universitarios.

Luego de la extensa reunión con la UNEF, Giorgio Jackson concluyó que “se puede aprender mucho de los estudiantes universitarios franceses y de sus conquistas de derechos por lo capaces que han sido de defender sus derechos y defender el rol social y estratégico que cada estudiante tiene como trabajadores del conocimiento”.

No obstante, lo más significativo para ellos fue el encuentro que sostuvieron por la tarde con dos grandes intelectuales de talla mundial.

El primer gran momento fue con el filósofo francés Edgar Morin, quien los recibió para escuchar la situación chilena –la que conocía muy bien- pero él quería escucharla de boca de los mismos estudiantes. Se extendió por más de una hora y contó con un extenso intercambio de reflexiones.

Edgar Morin, en perfecto español, enfatizó que “la educación superior, las universidades, no puede entregarse ni al mercado ni menos a los especuladores financieros, pues no existe en el mundo un contrapoder que los pueda controlar”. Les señaló que “se debe aprender de los ejemplos de otras movilizaciones a nivel internacional, que por su propio movimiento, ayudan incluso, como en el caso extremo de Egipto, a derrocar al dictador, al tirano”.

Camila Vallejo le manifestó a Morin su preocupación “por la excesiva competencia que existe en el sistema educativo chileno, pero también en las universidades… hasta los académicos universitarios compiten entre ellos por publicaciones o investigaciones, lo que no ayuda para construir comunidades verdaderamente académicas”. Ante ello, el intelectual francés le señaló que “los puros criterios de eficacia y eficiencia, criterios más bien economicistas, no pueden controlar la enseñanza o la academia, deben ser reemplazados por criterios más humanos y complejos”.

Por su parte Giorgio Jackson y Francisco Figueroa le interrogaron, primero, por cómo ampliar los contenidos de las demandas estudiantiles en Chile, y segundo, sobre qué se puede aprender de las movilizaciones internacionales.

Morin afirmó que “cambiar las estructuras mentales para romper las fronteras del conocimiento es más difícil que cambiar a las instituciones y que por ello ustedes los jóvenes son los únicos que pueden hacerlo”. Respecto al aprendizaje de otras movilizaciones en otros países afirmó con énfasis “la necesidad de tener ya respuestas posibles, pues la crítica es absolutamente necesaria, pero también los proyectos de reinvención”.

Para ello les regaló su recién aparecido último libro en español “La Vía” y los estudiantes, con entusiasmo, le invitaron a Chile a hablarles a los estudiantes, lo que él aceptó con gusto.

Encuentro con Stéphane Hessel

Por la tarde fueron recibidos por Stéphane Hessel, el famoso intelectual francés que ha inspirado el movimiento planetario de los indignados con su famoso texto “¡Indignaos!”, que ha vendido millones de copias en todo el mundo, y cuyas recaudaciones van directamente a diversas fundaciones de ayuda humanitaria.

El intelectual de más de 90 años los recibió con una gran vitalidad y entusiasmó a los estudiantes quienes lo escucharon atentamente.

Les indicó que él consideraba que “las mujeres debían ocupar un rol relevante en la movilización chilena, tal cual lo hace usted” señalando a Camila Vallejo. Enfatizó que “se debían usar todos los medios que hoy están a disposición para ampliar y diversificar el movimiento de indignación”, pero fue enfático en afirmar que “lo único que no debemos permitir es la violencia en ninguna de sus formas”.

En esta ocasión, dada la vitalidad de Hessel, los estudiantes básicamente le escucharon, después de una breve exposición que Jackson y Figueroa de la situación chilena sobre la diferencia que existe entre ricos y pobres en relación a la calidad educacional.

En este sentido, Hessel fue enfático en decirles a los estudiantes que “ninguna oligarquía económica y política puede ser aceptada, pues no ayudan ni a las democracias ni a los sistemas democráticos”; del mismo modo que Morin, les afirmó que “no podemos dejar todo en manos de la especulación financiera”.

Al finalizar el encuentro, Hessel les regaló su libro y los entusiasmó para continuar su movilización pero uniéndose con los estudiantes del resto de los países latinoamericanos.

(Con información de El Mostrador.cl)