Donald Trump durante su rueda de prensa en Jerusalén (AFP)

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump ^[1], hizo una estancia de un día ayer en Israel y hoy se dirige a Palestina, en su primera gira internacional, informan medios internacionales.

Poco después de su llegada a Tel Aviv, donde fue recibido por el primer ministro, Benjamin Netanyahu, Trump sostuvo una reunión con el presidente Reuvén Rivlin en Jerusalén.

Según Prensa Latina, Trump fue a la Ciudad Vieja, un hecho sin precedentes en las relaciones diplomáticas entre Washington y Tel Aviv, dado que hasta ahora ningún presidente estadounidense en activo lo había hecho. La ciudadela se encuentra en territorio palestino ocupado por Israel en 1967.

Trump visitó  en la Ciudad Vieja dos de los lugares más sagrados para el cristianismo y el judaísmo: el Santo Sepulcro, y el Muro de las Lamentaciones, respectivamente.

Hoy Trump viajará a la ciudad palestina de Belén, en la Cisjordania ocupada, donde se encontrará con el presidente palestino, Mahmud Abbas.

La última actividad pública de Trump durante la visita será un discurso en el Museo del Holocausto (Yad Vashem), donde se espera que se centre en el estado actual y perspectivas del diálogo de paz entre Israel y Palestina, previsiblemente el objetivo fundamental de su visita.

Durante esta gira, Trump le ha dedicado particular importancia a balancear los intereses norteamericanos en el Oriente Medio , en concreto a las relaciones de su país con los principales socios de la región: Arabia Saudita e Israel.

La visita de Trump se realiza en medio de una masiva huelga de hambre mantenida por unos 1 500 prisioneros palestinos en cárceles de Israel, quienes reclaman mejoras en sus condiciones de internamiento así como el fin a la práctica israelí de las detenciones administrativas.

(Tomado de Periódico Granma ^[2])