Por: Alfredo Carralero Hernández

Birán, como tierra fecunda por los valores patrióticos enraizados en su geografía, hoy extiende con más intimidad el homenaje perpetuo a su eterno Fidel, nacido en esa comunidad del oriente cubano el 13 de agosto de 1926 y quien falleciera el 25 de noviembre del 2016, a los 90 años de edad.

Con todos sus cedros, palmas y el entorno que le rodea en el municipio holguinero de Cueto, el asentamiento rural muestra su permanente lozanía y en una fecha como la de hoy, sus pobladores miran como toda Cuba con plena confianza y seguridad en la obra y en el legado del hijo que fundó una nueva Patria y abrió los caminos transformadores de una sociedad de igualdad a partir de enero de 1959.

Un día, en plena niñez, se alejó del entorno familiar abriéndose camino para el futuro que soñó, pero siempre regresó y finalmente volvió con las banderas de los triunfos, enarboladas hoy en todos los rincones de la Isla y como guía también en otras partes del planeta donde esta tierra es ejemplo y guía de humanismo.

Hoy, más que silencio por su partida física de cuatro años atrás, Birán como toda la nación mira hacia las raíces cultivadas por su líder histórico, por las obras del presente y el futuro generacional y la dignidad de una nación segura e independiente por siempre.

Ese es el Birán de Fidel, donde este 25 noviembre sus pobladores vuelven a los encuentros de años atrás cuando él recorría las instalaciones y las aéreas que conforman el sitio histórico que distingue a ese entorno para reiterarle en nombre de los cubanos que su obra revolucionaria y patriótica seguirá siendo la fortaleza de sus proyectos de rebeldía desde sus tiempos de lucha contra los gobiernos dictatoriales locales.

El tiempo afianza en cada una de las áreas del emblemático sitio los momentos presenciales de el por su tierra natal luego del triunfo de la Revolución, donde prevalecen la casa familiar Castro Ruz, como la de mayor atracción para los visitantes, la escuela, la valla de gallo, el correo, el hotel, el taller de mecánica y el naranjal, entre otras de las instalaciones que conforman el conjunto histórico.

Cada noviembre, desde hace cuatro años, todo ese conglomerado, Cuba y el mundo retoman la imagen formadora y creadora del eterno Comandante que perdura y perdurará como guía de los pueblos que luchan y aman la paz.

El homenaje trasciende y la fecha de la partida física se hace cada vez más universal en honor imperecedero al fundador de una sociedad que enarbola igualdad, justicia y pleno derecho al bienestar social con sus rutas de conquistas a través de las luchas estudiantiles, las acciones del Moncada, el desembarco del Granma y las columnas rebeldes desde la Sierra Maestra.

La imagen perpetua del Fidel universal, del líder histórico de la Revolución Cubana, tendrá por siempre a su natal Birán como punto de partida hacia los triunfos, hacia los proyectos renovadores de Cuba, que hoy lo recuerda dignamente como el Comandante invicto de las grandes batallas y de los éxitos de una sociedad que disfruta de sus sueños como rebelde que fue e insigne patriota que lo será por siempre, bandera y guía de cada cubano.

(Con información de Agencia Cubana de Noticias)