“Ocupa Wall Street” saca a la luz a personas sin hogar en Estados Unidos
Como sabe cualquiera que ha tenido que gestionar un campamento o construir una villa desde cero, las ocupaciones suponen grandes problemas logísticos. Se debe alimentar y mantener razonablemente caldeadas y secas a muchas personas. Hay que sacar la basura, brindar atención médica y una seguridad rudimentaria, para lo cual una docena de comités, o más, debe dedicarse día y noche. Pero para el individuo sin hogar, un problema suele opacar todo lo demás, incluso la pérdida del trabajo, la destrucción de la clase media y el reinado del 1%. Se trata de la simple pregunta: ¿dónde voy a orinar?