Canto a Mariana
«Y no es nuevo, ya la historia nos hablaba de grandes mujeres en nuestras luchas por la independencia, y una de ellas las simboliza a todas: Mariana Grajales (…) »Fidel Castro Ruz
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«Y no es nuevo, ya la historia nos hablaba de grandes mujeres en nuestras luchas por la independencia, y una de ellas las simboliza a todas: Mariana Grajales (…) »Fidel Castro Ruz
El presidente boliviano Evo Morales afirmó que el mejor homenaje al Che es continuar la lucha antimperialista, y que nunca como hoy el Guerrillero Heroico «es más necesario, está más vivo, se proyecta con más fuerza hacia el futuro». El Che, vive en los jóvenes, en su lucha inclaudicable por la igualdad y la liberación de los pueblos, resaltó por su parte Evo, según la Agencia Boliviana de Información.
A media mañana, Carlos Manuel de Céspedes le dio la libertad a su medio centenar de esclavos, gesto que imitaron otros propietarios presentes. Como «ciudadanos», se dirigió a los emancipados: «ese sol que véis alzarse por la cumbre del Turquino, viene a alumbrar el primer día de libertad. Los que me quieran seguir, que me sigan: los que se quieran quedar, que se queden. Todos seguirán tan libres como los demás». La mayor parte se incorporó a la sublevación.
De la trascendencia histórica de Carlos Manuel de Céspedes y Mariana Grajales y de la significación del traslado de sus restos hacia el área patrimonial central del cementerio de Santa Ifigenia donde se encuentran el Mausoleo a José Martí y el monolito con las cenizas de Fidel, disertarán especialistas e historiadores en la Mesa Redonda.
Se dice que por Villa Clara se ven muchas imágenes del Che y que casi todo el mundo lleva o tiene algo con su imagen. ¿De dónde nace esa relación que terminó convirtiendo a un hombre en sinónimo de una ciudad? A ese lugar al que acuden miles de cubanos y extranjeros para reencontrase con el héroe de Cuba y del mundo estuvo dedicada la Mesa Redonda del pasado viernes.
El espíritu revolucionario del Che, ese símbolo imprescindible del siglo XX que se ha extendido hasta la actualidad, anduvo a sus anchas por el globo; recorrió calles, atravesó pantallas; cruzó puertas y, como un gurú invulnerable al tiempo, permaneció en los miles que ayer conmemoraron el aniversario 50 de su caída en combate en Bolivia.