Al menos 20 personas, entre ellas un diputado nacional, han muerto y otras 30 han resultado heridas en un atentado suicida cometido durante un funeral en la provincia de Takhar, en el norte de Afganistán, ha informado el portavoz del gobernador provincial. El ataque ha sido perpetrado en torno a las 14.30 hora local (10.00 GMT) por un terrorista que se ha inmolado cuando se desarrollaba la ceremonia fúnebre en la ciudad de Taliqan, capital de Tajar, según el portavoz Mohamed Farid Zaki.

Países y diversas organizaciones expresaron a Siria su apoyo y condena por los sendos ataques terroristas del viernes que causaron 44 muertos y 166 heridos en esta capital, y complican aún más la crisis en este país. El presidente del Líbano Michel Suleiman llamó por teléfono al mandatario Bashar al-Assad, a quien expresó su respaldo y dijo que tales atentados están destinados a hacer malograr la iniciativa árabe concebida para resolver los problemas en Siria, difundió hoy la agencia de noticias Cham Press.

Desde muy temprano grandes multitudes de ciudadanos concurrieron a la Mezquita de los Omeyas para participar en los funerales de los mártires caídos como consecuencia de los atentados terroristas llevados a cabo el viernes en Damasco y que cobraron la vida de 44 personas (entre civiles y militares) mientras que otras 166 resultaron heridas. Los cuerpos de los fallecidos fueron llevados a la mezquita de los Omeyas envueltos con la bandera siria, donde comenzaron las rituales fúnebres en medio del clamor de los participantes que llamaban a la unidad nacional y afirmaban la firmeza frente a la conspiración que atenta contra Siria.

Las dos potentes explosiones de terroristas suicidas que este viernes se registraron en el centro de la capital siria Damasco dejaron al menos 40 muertos, la mayoría civiles, y un centenar de heridos, según la televisión nacional siria. Los expertos creen que con este ataque la oposición siria, apoyada por EE. UU. e Israel, intenta desestabilizar al país. A su vez, Rusia ve la resolución del conflicto en el diálogo y no repetición del “precedente libio”.

Una ola de por lo menos 14 explosiones dejó 60 muertos y casi 200 heridos en la peor acción coordinada de violencia que se haya producido en Irak en meses. La serie de ataques coordinados se producen días después de la partida de las fuerzas estadounidenses y en medio de una grave crisis en el gobierno entre el principal gobernante chií y los líderes políticos suníes que ha provocado tensiones sectarias.

Al menos 19 personas, entre ellas siete mujeres y cinco niños, murieron hoy luego que un minibús para el transporte de pasajeros estalló al pasar sobre una mina en la provincia afgana de Helmand, informó el portavoz provincial, Daoud Ahmadi. El hecho se registró en el distrito de Sangin, considerado un bastión de los talibanes.