Mientras estoy escribiendo estas líneas, dos misiles de la OTAN acaban de masacrar a una docena de inocentes civiles afganos en el más reciente ataque de la guerra que asola a ese país. Los hombres, mujeres y niños afganos normales y corrientes están pagando un sangriento precio por una guerra lanzada por los políticos de Occidente.

La demanda busca que en virtud de la Ley de Libertad de Información se den a conocer las circunstancias en las que se autorizan los ataques con ese tipo de aviones, así como la cantidad y proporción de bajas civiles. La ACLU presentó su solicitud por primera vez en enero, pero dijo que el gobierno simplemente se había rehusado a responder.

Auditores federales bloquearon un contrato militar de la controvertida empresa estadounidense Blackwater, luego que congresistas protestaron ante directivos del Pentágono. Los magistrados adoptaron su decisión luego de concluir que otras compañías habían sido injustamente excluidas de la posibilidad de ofertar por la misma tarea, confirmó el medio digital Democracy Now. De esa forma se puso fin a planes del Ejército de adjudicar un programa de entrenamiento de policías afganos al consorcio paramilitar.

Los militares de la OTAN han empezado a adiestrar perros para lanzarlos en paracaídas sobre las zonas de guerra. En las maniobras militares Cold Response que la OTAN realizó la víspera en Noruega los perros sujetos a paracaidistas saltaron desde una altura de tres metros, y proveídos con cámaras de vídeo aprendieron moverse sin ruido y atacar a personas armadas.

Veintisiete personas resultaron muertas y más de 50 heridas en una serie de atentados suicidas el sábado en la ciudad de Kandahar, al sur de Afganistán, dijo el jefe del principal hospital de la ciudad. Entre los muertos habían civiles y policías, dijo Abdul Qayyum Pukhla. Más temprano, había dicho que los fallecidos eran 21 pero que seis cuerpos más habían llegado a la morgue del hospital.

Al menos cinco personas murieron y otras tres resultaron heridas en un bombardeo realizado por aviones no tripulados estadounidenses contra un bazar del poblado de Mramshah, en el noroeste de Paquistán, reportó hoy la televisión local. De acuerdo con la cadena Dawn, el ataque fue perpetrado anoche contra un edificio que albergaba varias tiendas y talleres de automóviles en esa localidad tribal de Waziristán del Norte.