Josep Blatter ha sido reelegido como presidente de la FIFA por la cuarta vez consecutiva. En su discurso tras la elección declaró su intención de limpiar la imagen de la organización tras las numerosas acusaciones de corrupción.

Blatter no ha tenido oponentes en estos comicios, el único que hace poco quería competir por el puesto, el qatarí Mohamed bin Hammam, retiró su candidatura tras la información que la FIFA le abrió una investigación por supuesta corrupción.

“Recientemente han pasado cosas que me han dejado herido y decepcionado, tanto a nivel profesional como personal”, escribió entonces el qatarí en su blog. “Me entristece que las causas que defiendo y en las que creo tengan un precio tan alto: la degradación de la reputación de la FIFA. Anuncio mi retirada de la elección a la presidencia”

La candidatura de Blatter fue apoyada por 186 de los 203 delegados del congreso de la organización.

“Transferiremos la nave de la FIFA al rumbo correcto en las aguas claras y transparentes”, prometió Blatter. “Necesitaremos cierto tiempo, pero lo haremos. Nuestra pirámide es sólida porque sólida es la fundación”.

Blatter encabeza la FIFA desde el año 1998, pero en el último tiempo, después de celebrarse las elecciones de los países que organizarán los Mundiales del 2018 y 2022, recibió más críticas que nunca. El representante de Inglaterra (país que también pujaba por una de las candidaturas) en las elecciones de las sedes, Lord Triesman, declaró que al mismo tiempo cuatro delegados le propusieron venderle sus votos.

El escándalo obtuvo tanta resonancia, que hasta los principales sponsors de la FIFA llamaron a la institución a reformarse. Algunos cambios ya están anunciadas: por ejemplo, Blatter afirma, que en el futuro los países organizadores de los Mundiales serán elegidos por los 208 miembros de la organización, en vez de los 24 representantes del comité ejecutivo como se ha venido haciendo en las últimas ocasiones.

Según las palabras de Blatter, el mandato actual de 4 años será el último, prometió dejar el cargo en el año 2015.

(Con información de RT Actualidad)