Cuba proyecta perfeccionar servicios de informática y comunicaciones
El ministro de la Informática y las Comunicaciones de Cuba, Maimir Mesa, expuso hoy aquí ante el Parlamento acciones encaminadas a perfeccionar el acceso a los servicios telefónicos, postales y de Internet.
Mesa presentó a la plenaria de diputados el informe de gestión de su cartera, en el que se exponen las transformaciones de la entidad de cara a la actualización del modelo socio-económico del país caribeño, proceso que a partir de los lineamientos del VI Congreso del Partido Comunista busca una mayor eficiencia y productividad.
El incremento de las líneas telefónicas fijas y móviles, el avance en la eliminación de las zonas de silencio en el centro y el oriente de la isla y la ejecución de un plan de reforma integral para elevar la calidad y el funcionamiento del sistema postal se incluyen entre las prioridades.
También está en la agenda potenciar el uso social de Internet, beneficiando en primer lugar a los centros educativos y de investigación, precisó el titular en el habanero Palacio de Convenciones, donde el lunes pasado comenzaron las sesiones de la Asamblea Nacional previas al fin de su VII Legislatura.
De acuerdo con Mesa, se trabaja en proyectos como la puesta en operación del Centro de Datos Públicos y la Plataforma de Correo Electrónico, así como para mejorar la conectividad y garantizar una mayor seguridad de las redes.
Respecto a experiencias actuales del uso social de Internet, Mesa destacó los Joven Club de Computación, que disponen en las 15 provincias cubanas de unas 600 instalaciones con un total de más de seis mil 700 ordenadores.
Según el ministro de la Informática y las Comunicaciones, desde su creación en septiembre de 1987 esa iniciativa ha graduado en diferentes cursos una cifra superior a las tres millones de personas.
Mesa expuso además acciones para perfeccionar el trabajo de la entidad, en aras de una mejor labor en sectores como las telecomunicaciones, el servicio postal y el aseguramiento técnico, entre otros.
Ese proceso incluye cambios estructurales en el Ministerio y la base normativa, apuntó el funcionario, quien mencionó la incorporación de nuevas formas de gestión no estatal, como el agente postal y el de telecomunicaciones, actividades con expectativas de un impacto favorable en la comunidad.
El auge del llamado cuentapropismo en Cuba -sector privado- es una de las aristas de la actualización económica en marcha, aunque no la más importante, considerando que el Gobierno ha dicho que ese rol le corresponde al logro de una empresa socialista productiva y eficiente.
Ante el Parlamento, Mesa abordó los resultados de las tareas de recuperación del impacto del huracán Sandy, meteoro que golpeó el oriente del país el pasado 25 de octubre, con Santiago de Cuba como la provincia más afectada.
En ese sentido, el titular resaltó el restablecimiento de la mayor parte de los alrededor de 48 mil servicios telefónicos interrumpidos en ese territorio.
Durante la plenaria, varios diputados intervinieron con preocupaciones sobre los precios en la telefonía celular, el acceso a Internet en universidades de la isla y el combate a las ilegalidades en las telecomunicaciones.
Para mañana está prevista aquí la jornada final de la VII Legislatura de la Asamblea Nacional del Poder Popular, en la que se someterán a aprobación el Plan de la Economía y el Presupuesto del país para 2013.
(Con información de Prensa Latina)
Cuba potenciará uso social de Internet
Comentario “?Puede pagar el pueblo trabajador el uso social de Internet y la telefonía móvil?
No, la moneda de pago que recibimos los millones de trabajadores y jubilados de nuestra sociedad, solamente nos permite satisfacer nuestras necesidades elementales, como los alimentos y la compra con un enorme sacrificio de algunos bienes de uso personal, en especial para nuestros hijos menores y ancianos padres.
Es un lujo que no puede darse el trabajador cubano el acceder al uso de la telefonía celular con sus altos precios por sus servicios, amen de que en primer lugar no pueden adquirir esos móviles y mucho menos mantener el pago de los servicios en CUC, ya que no tienen la disponibilidad de la moneda de pago para los mismos, aun cuando se esta planteando la rebaja en el cobro del servicio. Son innumerables las desigualdades sociales que se agravan cada día, por la diversidad de monedas en curso y la de menor escala es la de pago a los trabajadores cubanos.
¿Quiénes pueden adquirir esos móviles y sus servicios? Los cubanos de FE, familia en el extranjero, facilidades de extorsión u corrupción, facilidades de empleo en pull u empresas mixtas u otras entidades estatales, jubilados de entidades militares con nuevo empleo, algunos trabajadores por cuenta propia u propietarios de bienes de servicio publico de transporte, artistas, propietarios de tierras con producciones rentables como el tabaco, café, arroz y otras producciones agrícolas. La telefonía celular es un servicio de una elite social, que no representa a la inmensa mayoría de la sociedad cubana.
Ni mas esta decir del “llamado uso social de Internet” que se pretende llevar a cabo, ya que para acceder a ese servicio, es necesario tener determinadas técnicas de la comunicación como teléfono y computadoras; que por demás están vedadas a esa inmensa mayoría de nuestro pueblo trabajador, que no puede tener acceso a Internet, ya que no posee los medios de comunicación referidos, pero además si los tiene de seguro se cobrara en CUC, lo cual obstaculiza ese acceso.
Para que todos podamos acceder a ese benéfico que representa hoy para la humanidad la telefonía celular y la INTERNET, lo primero que se debiera pensar hacer es NO AL AUMENTO SALARIAL, sino el que se pague en la moneda que realmente satisfaga nuestras necesidades materiales, espirituales y de esa comunicación que es asequible en otras latitudes.
Lo primero es rescatar el Nivel mínimo de calidad de vida, con un salario decoroso, para que la dignidad de las personas no sufra menoscabo. Por ende lo primordial es RESCATAR el valor que siempre tubo el PESO CUBANOOOOOOOOOOO.
Es hora de actuar rápidamente, no de hablar
Manuel La Cana Atribulada