Gobierno interino de Brasil frena investigaciones por corrupción política

Romero Jucá anunció que abandonará temporalmente su cargo, tras la filtración de un audio en el que conspira para promover el juicio político contra Dilma Rousseff.

Luego de suspender sin bases legales a la presidenta Dilma Rousseff, el gobierno interino de Brasil que dirige Michael Temer busca  frenar las investigaciones por corrupción de políticos y empresarios.

De acuerdo con el diario brasileño Folha de Sao Paulo, el senado del Partido del Movimiento Democrático de Brasil (PMDM) y actual ministro de Planificación, Romero Jucá, prometió al expresidente de la compañía Transporto, Sérgio Machado, un pacto para frenar la Operación Lava Jato- que pretende indagar en el lavado de dinero y malversación de fondos, en crímenes en los que están involucrados varios de los ministros nombrados por Temer- en caso de lograr la suspensión de Rousseff.

De acuerdo con el rotativo la prueba está en unas grabaciones de 75 minutos obtenidas por la Fiscalía General de la República en el mes de marzo en las que Jucá, considerado el hombre de confianza de Temer, prometió “estancar la sangría” de las investigaciones de la Policía Federal una vez el gobierno interino tomase posesión.

En la conversación el empresario exigió a Jucá medidas desde el nuevo gobierno para frenar el avance de las investigaciones en su contra desde el Tribunal Supremo Federal (TSF) hasta el juez de la Justicia Federal, Sérgio Moro.

Romero Jucá fue acusado por miembros de las constructoras Camargo Correa y Andrade Gutierrez como receptor de sobornos provenientes de los contratos para las obras de la central nuclear Angra 3 y la hidroeléctrica de Belo Monte; mientras que el ministro de Casa Civil, Eliseu Padilha, y el secretario especial de gabinete, Moreira Franco, ambos exministros en el gobierno de Fernando Henrique Cardoso, fueron acusados de recibir sobornos a cambio de facilitar el nombramiento del exsenador del Partido de los Trabajadores (PT), Delcidio Amaral, como director de Petrobras en 1999.

Existen también sospechas de que el expresidente de la Cámara de los Diputados e impulsor del impeachment, Eduardo Cunha, del PMDB, ofreció un pacto para enterrar la Operación Lava Jato a los diputados investigados de los partidos minoritarios del Congreso Nacional, a cambio de un apoyo durante la votación para destituir a Rousseff.

(Con información de AVN)

Haga un comentario.

Deje su comentario. Usted también puede subscribirse a estos comentarios vía RSS.