Un total de 19 campesinos hondureños fueron asesinados en el Bajo Aguán desde enero de 2010 hasta hoy y todos los crímenes permanecen impunes, denunció una misión internacional que visitó la zona. Durante la verificación, realizada entre el 25 de febrero y el 4 de marzo, el grupo constató múltiples violaciones de los derechos humanos.
El programa radiotelevisivo Mesa Redonda Informativa de este lunes, “Golpes y contragolpes en Latinoamérica y el Caribe”, propició el análisis de importantes acontecimientos, que hoy son noticia en medios de prensa de la región y el resto del mundo.
En un primer momento, los destacados analistas que integraron el panel enfocaron el debate sobre un sorprendido pueblo haitiano, que despertó este lunes el ante el regreso del ex dictador Jean Claude Duvalier.
El asesinato de cinco periodistas en el pasado mes de marzo y el exilio de otro reportero han convertido a Honduras en el país más peligroso del mundo para los profesionales de los medios de comunicación en el primer trimestre de 2010, indicó hoy Reporteros Sin Fronteras (RSF).
Estos días Cuba y Venezuela acaparan las portadas de los periódicos. Si los medios estuviesen sinceramente preocupados por los derechos humanos, el estado de derecho o la democracia, en primer lugar se preocuparían, en el caso de El País o Público, por informar preferentemente de su propio país en donde hay un gran déficit democrático y abundan las violaciones de derechos humanos.
Dos periodistas fueron asesinados a tiros este viernes por desconocidos en Olancho, este de Honduras, lo que se suma a la muerte violenta de otros tres este mes en distintas regiones del país. La Policía informó que los periodistas Ballardo Mairena y Manuel Juárez viajaban juntos en un vehículo y fueron interceptados por los asesinos en la carretera que conduce de Juticalpa a Catacamas, departamento de Olancho, en las cercanías de la finca La Empalizada, propiedad del presidente de Honduras, Porfirio Lobo.
Miles de personas marcharon en Tegucigalpa, la capital hondureña, para demandar el cese de la escalada represiva y contra la aplicación de políticas neoliberales que afectan a los pobres. La manifestación fue convocada por el Frente Nacional de Resistencia Popular (FNRP), una amplia alianza de fuerzas sociales y políticas progresistas surgida horas después del golpe militar del 28 de junio pasado contra el entonces presidente Manuel Zelaya, informó la agencia Prensa Latina.